¿Por qué somos adictos al pan?

El pan es un alimento básico en la alimentación, generalmente acompaña casi a cualquier comida, sin embargo el exceso de su consumo puede hacer que dejemos de comer alimentos saludables y protectores como las frutas, verduras, frutos secos y legumbres. 

¿Panadictos?

Nuestro sistema nervioso tiene unos receptores llamados “receptores opioides”, que pueden conectar con sustancias opiáceas capaces de anestesiarnos y sedarnos o producir euforia en nuestro sistema nervioso, bloqueando y mitigando la sensación de dolor. Esto pasa, por ejemplo, cuando hacemos ejercicio, ya que se liberan endorfinas, que nos dan esa sensación de bienestar. También hay otra sustancia opiácea relacionada con la adicción y no es otra que la dopamina. Y todo ello tiene que ver con el pan.

Hay estudios que sugieren que durante la digestión del gluten, se podría activar en nuestro organismo efectos adictivos,  para que estos compuestos del gluten actúen, deben atravesar una de las barreras de protección del cerebro, cosa que ocurre en los celíacos. Esto parece tranquilizador.

Además del propio gluten, hay  otras características del pan que lo hacen “adictivo”, como su esponjosidad y su crujiente corteza. 

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