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Tensión en las universidades de EEUU: detuvieron a cientos de estudiantes en protestas propalestinas
La situación en las universidades de Estados Unidos ha alcanzado un punto crítico con la detención de cientos de estudiantes en una serie de protestas propalestinas. Los enfrentamientos entre alumnos y fuerzas de seguridad han llevado a un temor generalizado de una ola de violencia mayor.
El movimiento estudiantil propalestino en Estados Unidos está en constante crecimiento, y se ha manifestado de manera contundente en numerosas universidades alrededor del país. Estas manifestaciones han llegado a generar llamados de emergencia por parte de las autoridades universitarias en instituciones prestigiosas como Princeton y Harvard.
El clima de tensión se ha profundizado aún más con la instalación de tiendas de campaña en los campus universitarios, donde los estudiantes denuncian tanto el apoyo militar estadounidense a Israel como la difícil situación humanitaria en la Franja de Gaza. Hay quienes comparan esta situación con las protestas contra la guerra de Vietnam en la década del 70, temiendo un estallido de violencia de la misma magnitud.
Uno de los incidentes más destacados ocurrió en Boston, donde más de un centenar de manifestantes fueron detenidos cerca del Emerson College. En Austin, agentes a caballo arrestaron a decenas de estudiantes de la Universidad de Texas. En el campus de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles, 93 personas fueron arrestadas por invasión de propiedad privada, lo que llevó al cierre del campus hasta nuevo aviso.
La Universidad de Columbia, en Nueva York, es otro epicentro de las protestas, donde desde el 15 de abril se han levantado tiendas de campaña en los jardines. Estudiantes y graduados exigen a la dirección de la universidad que corte sus lazos con empresas vinculadas a Israel.
Estos manifestantes expresan su indignación por el creciente número de muertos civiles en la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamas.
Sin embargo, los estudiantes judíos consideran que estas manifestaciones representan una amenaza para su comunidad y crean un clima hostil en su contra. Algunos han denunciado ataques verbales y físicos por parte de individuos agresivos, generando un clima de miedo y preocupación.
La tensión ha llegado a su punto máximo con la colocación estratégica de banderas de Israel en las protestas propalestinas. Junto a estas banderas, de menor tamaño, se encuentran también banderas de Estados Unidos de mayor tamaño. Las autoridades temen que esto pueda propagar incidentes antisemitas, y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, ha advertido que de no detenerse las manifestaciones, se podría recurrir al despliegue de efectivos de la Guardia Nacional.
Ante el aumento de las movilizaciones, la Casa Blanca ha manifestado que el presidente Joe Biden apoya la libertad de expresión en las universidades, pero rechaza cualquier manifestación que incite al odio o a la violencia.
