Esta mañana se reformularon cargos a los instructores Alfredo Nahuelcheo, Maximiliano Vitali Méndez y Marcelo Contreras y al jefe del COER Alejandro Gattoni, en el marco del homicidio culposo del agente Gabriel Mandagaray el 15 de abril de 2021.

Se trató de una instancia legal donde se sumaron los resultados de la autopsia nacional a las formulaciones de cargos ya vigentes. Además, se extendió el plazo de investigación hasta el último día hábil de este año, para luego la posterior audiencia de control de acusación.

La audiencia estuvo presidida por el juez Juan Martín Brussino Kain, por la Fiscalía se presentó Guillermo Ortíz, la Querella contó con el abogado Damián Torres y los letrados defensores fueron Manuel Maza y Luciano Perdriel (por Nahuelcheo), Santiago Guenumil (Vitali Méndez), Armando Salazar (Contreras) y Oscar Pineda junto con Fernando Ramoa por Gattoni (vía Zoom).

En la instancia judicial, el fiscal Ortiz relató los hechos: "Esta audiencia fue solicitada para reformular los hechos que oportunamente se formularon, a partir de la nueva evidencia que hemos ido recolectando y para mayor completitud" y añadió que los imputados "llevaron adelante un curso en un lugar y en condiciones que no eran las acordadas".

Primeramente, citó que el entrenamiento debía haberse desarrollado en el Kilómetro 15 de la ruta Provincial 1 de Viedma y no en la playa de Bahía Creek.

"Modificaron el lugar hacia Bahía Creek, los hicieron bajar del micro en la estancia Las Marías de la ruta Provincial 51, donde luego de haber hecho ingresar a los cursantes en un estanque de agua iniciaron una caminata de aproximadamente 40 kilómetros, hasta llegar al balneario. Fue en horario nocturno, todos mojados, con bajas temperaturas, hasta que llegaron a dónde acamparon hasta el día 15 de abril de 2021", precisó.

Remarcó en igual línea: "Desde el momento en que arribaron al lugar y durante lo que duró el curso, se sometieron a excesivos desgastes físicos, que generó heridas en los pies y en las manos de los cursantes. Además, llevaron conductas contrarias a la dignidad de los cursantes, tales como orinar a Mandagaray, hacerles colocar máscaras con excremento animal en sus rostros, hacerlos ingresar a la madrugada al mar desnudos y sin ningún tipo de medida de seguridad, y generando en algunos cursantes hipotermia, todo ello bajo un contexto de escasa alimentación e hidratación".

Por otro lado, respecto a la fatídica tarde, resaltó que los superiores policiales "causaron su muerte por asfixia por sumersión, como consecuencia de una hemorragia subaracnoidea traumática. Este desenlace se produjo en ocasión de que estaban desarrollando el curso básico del COER, en igual que no era el indicado ni el autorizado, mientras realizaban una actividad de ingreso al mar que no estaba contemplada".

"Luego de formar a todos los cursantes en el sector de la playa, en filas de a tres, ingresaron al mar por grupos cargando troncos denominados pirulos. Los instructores dieron la orden de que ingrese el primer grupo, entre los que estaba Gabriel Mandagaray, quien había manifestado que no sabía nadar e igual le ordenaron que ingrese vestido con todo el uniforme policial, incluso armas, borcegos y sin ninguna medida de seguridad como chalecos, torpedos de apoyo, lanchas, ni guardavidas", narró.

"En el contexto de cansancio físico y psicológico en el que se encontraban los cursantes, sumado a la escasa ración de alimento y de hidratación, hicieron entrar a Madagaray y a sus compañeros Erice y Quiriban", subrayó y comentó: "Este primer grupo en un momento no hizo pie y al momento de retornar a la orilla comenzó a dificultarse su egreso, por las condiciones de la marea y las fuertes correntadas, que generaron un movimiento de aceleración y desaceleración en la cabeza de Mandagaray y golpes contra el tronco que llevaba, lo cual produjeron hemorragias y el hundimiento que causaron la muerte".

"Los tres instructores no cumplieron con el plan y existieron conductas que no eran parte de la planificación. Asimismo, Gattoni omitió exigir hacer cumplir la resolución que aprobó el curso de formación", resumió.

A todo esto, a Contreras se le sumó el agravante de lesiones contra un agente, debido a que habría pateado a uno de ellos y la habría fractura una vértebra.

Mañana viernes se reformularan cargos a Carlos Grasso y Oscar Szymansky -responsables del área de Capacitación de la Policía- por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos en calidad de autores.