Una extensa investigación quedó en la nada luego de una serie de extensos trámites en el marco de una causa por robo de 800.000 pesos y abuso de arma denunciado en una parcela aledaña a San Javier.

El hecho delictivo ocurrió en junio pasado en inmediaciones del balneario de la vecina localidad cuando una persona observó que dos hombres ingresaron a la casa de un vecino. Fue preciso al describir a los intrusos. Ambos vestían boinas y alpargatas.

El testigo dijo haber visto cómo se llevaban varios elementos, y previo a la huida en un vehículo Audi, de color gris con techo negro, efectuaron cuatro disparos hacia el vecino, quien no resultó lesionado.

Una hora más tarde llegó el propietario, y se encontró con la puerta de ingreso a la vivienda destruida, y tras una revisación tomó conocimiento del faltante de semejante monto que se encontraba dentro de una caja de chapa con candado y una motosierra. A continuación, ambos concurrieron a presentar sendas denuncias a la Comisaría 41º de esa localidad.

Las primeras investigaciones policiales, a partir de las observaciones de cámaras de seguridad, encontraron el Audi e identificaron al propietario del vehículo por lo tanto, los integrantes del Cuerpo de Investigación Judicial (CIJ) solicitaron un allanamiento que fue autorizado por el Juez de Garantías, Juan Pedro Puntel.

En forma coincidente, buscaron huellas de los sospechosos en el domicilio de la víctima, pero no encontraron nada, y nunca encontraron a los que se llevaron el dinero pese a que realizaron discretas vigilancias sobre el domicilio.

Hacia fin de ese mes, los investigadores sospecharon que en esa casa había gente, aparecieron con otro allanamiento pero sin resultados positivos para esclarecer el caso.

Que del análisis de las constancias incorporadas al legajo, el Ministerio Público Fiscal (MPF) llegó a conclusión de que no había datos suficientes como para acreditar la autoría por lo tanto el trámite fue archivado. Esta decisión se conoció en forma pública durante esta semana.