Desdoblan la causa por el sangriento hecho y no descartan el archivo

La Justicia investiga a los implicados en el hecho, tanto al baleado como a la persona que murió y a su acompañante que terminó herido.

Muy lento comienzan a conocerse los avances en la causa por la muerte de Leandro Ezequiel Zapata, y el ataque a balazos que recibió Franco Agilante López en Patagones.

Según informaron fuentes judiciales a NoticiasNet, la causa se desdobló. Por un lado el hecho del suicidio está en la órbita de la Unidad Funcional de Instrucción Judicial (UFIJ) N°9, en tanto que la tentativa de homicidio en la UFIJ N° 5. Ambos organismos pertenecen al Departamento Judicial Bahía Blanca.

Por ahora, continúan las investigaciones, pero si se determina que el que disparo en la calle Descalzi al 500 es responsabilidad del fallecido, la causa por tentativa de homicidio  se archivará. Lo mismo podría ocurrir si se comprueba que se suicidó el conductor.

Desde la Justicia se informó que “igualmente para ambos lados hay que investigar”, y luego se verá con las pruebas en mano si las causas se archivan o continúan su curso.

El hecho

Todo comenzó el 26 de agosto pasado en la calle Nicolás Descalzi casi Sanchez de Rial en el barrio Villa Rita cuando Franco Agilante López fue baleado.

Sobre este hecho puntual, el juez que entiende en la causa informó a la prensa que pasadas las horas de lo ocurrido “sabemos que dos personas que venían en un vehículo, interceptan a Franco Aguilante López, le preguntan si era él y al responder afirmativamente le hieren en el brazo, pese a que otros disparos no llegaron a destino, en lo que se trataría de una tentativa de homicidio”.

Acto seguido los ocupantes de vehículo se fugaron, pero fueron observados por las cámaras de seguridad del Centro Monitoreo que los ubicaron. Ahí comenzó la persecución que terminó con la feroz balacera en inmediaciones del puesto de control sanitario de Juan A Pradere.

En este lugar murió Leandro Ezequiel Zapata. Se investiga si se suicido, y fue apresado Federico Emiliano Crespo, con una herida en la mano.