Se vivieron momentos de mucha tensión en la toma 2 de Enero

En la mañana de este viernes se vivieron momentos de inmensa tensión en la toma 2 de Enero de Viedma, en los terrenos que eran del club Fátima, a 100 metros del ex prebasural de la Ruta 1.

Los temores se generaron por una orden de desalojo y derrumbes de casillas con topadoras en ese sector. 

Uno de los referentes de la toma habló con el fiscal Guillermo González Sacco, quien informó: “Esto es una propiedad privada, tienen 48 horas”.

El representante del Ministerio Público se refirió al líder de la toma y le comentó: “A vos te dije que te iba a dar el plazo, yo no quiero ver más que haya cuatro tablas rodeadas de alambrado que digan González Sacco porque no es así, eso te lo expliqué desde el minuto cero”.

Dijo que si se comprometen a sacar las tablas “y queda la gente que efectivamente está viviendo lo podemos manejar de otra forma”.

González Sacco tras la palabra asumida por los ocupantes, dictó el levantamiento del desalojo hasta el lunes próximo, donde realizará una nueva recorrida con los referentes barriales. 

Ante la consulta de un vecino sobre las respuestas del municipio, expuso: “Es una decisión judicial, no demos más vueltas, el lunes volvemos a hablar”.

Esfuerzo tirado al piso

El legislador del Frente de Todos, Raúl Martínez, estuvo en el lugar en el momento que las topadoras derrumbaron casillas. Al respecto, dijo: “Estoy preocupado por este atropello, causa mucha indignación ver tanto esfuerzo de la gente para levantar una casilla y que venga el propio Estado y se encargue de destruirla y echarlos a la calle”.

Explicó asimismo: “Vine a interiorizarse sobre la orden judicial, hablé con el fiscal Sacco y me confirmó que no iban a avanzar sobre las casillas donde hubiese gente viviendo, me interesaba fundamentalmente la integridad de las personas que hay acá, sobre todo de los chicos”.

Además, se mostró impotente por la falta de equipos técnicos de Desarrollo Social y de Salud “que debieran estar presentes en este tipo de procedimientos”.

Calificó esta decisión como un “desastre” debido a que “hay gente a la que le costó mucho trabajo comprar un tirante o unas chapas, capaz que hasta dejaron de darle de comer a sus hijos para poder tener un techo”.

En cuanto a lo que destruyeron, que estaba desocupado, enfatizó: “La gente duerme en otro lugar y luego viene, la prueba es que en la mayoría de las casillas que se tiraron uno puede ver a las personas tratando de recuperar algo antes de que se lo quemen o se lo tiren, quiere decir que las familias existen y necesitan de sus casillas. Nadie va a ser una inversión de madera o incluso de pisos simplemente porque tienen ganas de invertir”.

Comunicado del Ministerio Público

Según indicó la Fiscalía, en el lugar se habían construido más de un centenar de casillas que no se encontraban ocupadas, tal fue constatado en diversas oportunidades por el organismo, agentes de la Policía de Río Negro y equipos de Desarrollo Social tanto del Municipio como de la Provincia.

En la mañana de hoy, desde las 8, luego de verificar cada una de las casillas que efectivamente estaban construidas y garantizar que se encontraban sin gente y sin ningún tipo de mueble en su interior, se produjo la remoción de dichos materiales.

El Fiscal González Sacco mantuvo una reunión con vecinos que le pidieron una nueva prórroga para recuperar los materiales. Luego de ello, el funcionario judicial dispuso el cese de los trabajos que retomarán el lunes a primera hora, procurando que durante el fin de semana quienes tengan materiales puedan retirarlos voluntariamente.

Las instancias de diálogo continuarán para poder darle una solución pacífica a la problemática habitacional tendiendo puentes entre los vecinos y los organismos correspondientes, en el marco del proceso judicial iniciado el primer día hábil del 2019, cuando los propietarios de la tierra efectuaron la denuncia.