Hace unas semanas, el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), reveló que el consumo en supermercados y distintos centros comerciales, mostró un repunte en los últimos meses, luego de la caída en los niveles de venta que provocó la crisis del sector en 2020 a causa de la pandemia de coronavirus. Según el estudio, las ventas minoristas de agosto crecieron, pero sin embargo el informe indica que se ubicaron 6% por debajo de las de agosto 2019, mientras que el acumulado de año subieron 13,7% frente a 2020 pero cayeron 12,3% respecto a 2019.

Frente a estos índices que indican un leve crecimiento, pero que confirman que aún no se ha vuelto a los niveles de venta y consumo previos a la pandemia, las estrategias comerciales cobran una relevancia central como nunca antes. La competencia por acaparar a los consumidores, implica que los supermercados y centros comerciales, deban impulsar distintas ofertas de consumo.

Supermercados ante los niveles de consumo

El CAME, informó recientemente que en el mes de julio de 2021, las ventas crecieron 0,6% en promedio, en los rubros de jugueterías y librerías, 17,7%, ferreterías, materiales eléctricos y construcción (10,7%) y farmacias (4,2%); mientras que las mayores caídas ocurrieron en calzado y marroquinería (-8,1%), alimentos y bebidas (-4,1%) e indumentaria, lencería y accesorios (-3,3%). Ante estos niveles, los supermercados debieron desarrollar distintas estrategias para fomentar el consumo. El retorno de las actividades de construcción, académicas y sociales, son clave para que también aumente la demanda de distintos productos.

En cuanto a la demanda, el CAME indica que:

Respecto de agosto de 2020 crecieron 9,1% en promedio, con las mayores tasas de variación:

• Indumentaria, lencería y accesorios (38,5%)
• jugueterías y librerías (24,0%)
• ropa y artículos deportivos y de recreación (26,4%)
• alimentos y bebidas (-7,1%) y perfumería y cosmética (-8,8%).

Para aumentar el consumo los supermercados están trabajando con distintas tarjetas de crédito, impulsando pagos en más cantidad de cuotas. Además, en la provincia de Santa Fe, algunas de las cadenas más importantes operan con Billetera Santa Fe, una opción que reintegra un 30% del monto consumido en 24 o 48 horas hábiles posteriores a la compra del consumidor. Otra de las políticas que está fomentado el aumento de los niveles de venta en los supermercados, es la compra online. En ese sentido, el desarrollo de plataformas claras, rápidas y con opciones de acceso para la compra, pago y envíos a domicilio es clave. Pero los consumidores también demandan que los comercios ofrezcan la opción de compra a través de los servicios de envíos a domicilio más importantes del país, que por lo general cuentan con app móviles específicas. Desde el punto de vista del cliente final, es importante analizar y aprovechar las diferentes promociones según el día de compra, la tarjeta a utilizar, o los productos a adquirir. El portal Kimbino en este caso suele ser una muy buena alternativa, ya que integra en su sitio web las promociones actualizadas de Carrrefour, Coto, Jumbo, Dia, Makro, ChangoMas, entre otros, además de diferenciar inclusive por ofertas locales de ciudades específicas.

Respecto a las apps, este es un fenómeno que la pandemia impulsó por necesidad, pero que permitió mostrar las ventajas y beneficios tanto para los comercios, como así también para los consumidores. Por ejemplo, la mayoría de las aplicaciones agregan un sistema de puntaje y cupones de descuento que se adquieren con cada compra, lo que representa un incentivo para el comprador. No solamente en Argentina, sino en distintos países de Latinoamérica, estos hábitos de consumo se han instalado. Para finalizar, nada mejor que una estadística concreta. Como señala Raig Webster, Director de Marketing de Infobip para América Latina, actualmente el 77% de los argentinos optan por las compras online.