Continúa la investigación de uno de los casos que más conmovió a la Comarca durante este año: el accidente fatal en la Ruta 250, a la altura de Cubanea. Se recuerda que el domingo 17, en horario nocturno, chocaron una Toyota Hilux conducida por Liliana Padilla, mendocina de 38 años, y una Duster manejada por Fabián Andrade.

En la Renault fallecieron Martha Andrade de 75 años, y los hijos de Fabián, Juan Cruz de 28 y Tomás de apenas 11.

El abogado de Padilla, quien está en prisión preventiva, Juan Pablo Merlo dialogó en Radio Noticias para contar la posición de su defendida. Al respecto, explicó: "Padilla se encuentra privada de la libertad y recordemos que un accidente lo puede tener cualquier vecino de Viedma. Una cosa es cuando uno produce un homicidio con una escopeta, ahí podemos hablar de un asesino. Pero cuando una persona va por la ruta y no hay intención de matar dejamos de hablar de un hecho doloso, sino que hablamos de un accidente de tránsito, más allá de quién tenga la culpabilidad".

"No merece ser detenida porque no fue a propósito, sino que fue un hecho fortuito y sin intención. Nosotros lo que vemos acá es que cuando se mete la cola de la política y la presión mediática, muchas veces esa presión direcciona a malas decisiones", indicó.

"Los abogados cuando estudiamos Derecho queremos que los verdaderos asesinos estén presos y no personas comunes y corrientes. Esta es una señora soltera, que mantiene a su hijo, que trabaja, no tiene antecedentes penales, no iba borracha ni drogada, es una persona de bien y no es justo que estén tratando que pague una condena de varios años por un accidente que le puede ocurrir a cualquiera", sostuvo.

Asimismo, dijo que hubo un trato inhumano: "Ella también podría haber perdido la vida y no es justo que esté detenida, cuando no sabemos ni siquiera si tiene hemorragias por dentro o golpes. En un accidente tan grande, mandarla detenida a los dos días es poco comprensible por la vida humana. Mandaron a una persona en ese estado con otras detenidas que están por homicidio y por robo. Es una locura mandarla a un Penal".

Consultado sobre el abandono de persona, Merlo expresó: "Cuando se sufre un accidente de semejante magnitud, hay personas que reaccionan quedándose sentadas, otras que van a colaborar y ven en qué pueden ayudar porque no son médicos, y hay otras que salen corriendo. Esta señora al escuchar al papá de los chicos gritando y sufriendo, que salió arrastrándose sola por la ventana y toda dolorida, reaccionó arrastrándose lo más lejos que podía de ese lugar ¿Por qué? Porque cada persona reacciona a su manera".

"Son reacciones estando en schock, pero no quiere decir que sea mala o se alejó para no ayudar", completó.

En torno a por qué se fue a 100 kilómetros del sitio, Merlo expuso: "Ella llamó a su amigo Guido Cervera, le dijo que la vaya a buscar. Guido constató que en el lugar se había pedido ayuda, la trasladó a Conesa que era el lugar donde ella alquilaba, la dejó en el departamento, habló con ella, dijo que la lleven al médico, se entregó con la Policía y lo primero que pregunta es sobre cómo estaba la familia. No hablamos de una persona que se fue y con intenciones de ocultarse. Hablamos de una trabajadora de la tierra que sufrió un accidente, que no quiso hacerle daño a nadie porque ni siquiera los conocía y tomó esa reacción. Si por esa reacción la van a meter presa siete años, me parece que no es justo".

En cuanto al reclamo de dinero que hizo a través de una servilleta, amplió: "Una señora que va a pedir 17 millones de pesos, cuando en realidad habían 500 mil pesos, es porque sufrió un accidente y estuvo shockeada. Hasta el día de hoy ella pide tratamiento psicológico. Si usted tiene un accidente y mata a un perro en la calle se pone mal, imagínense en un accidente donde tres personas pierden la vida. Está shockeada y el fiscal no le puede dar bolilla a una persona que pidió 17 millones".

"La presión social llevó a que la detengan, porque la persona que sufrió el accidente (por Fabián Andrade) es de Viedma, estuvo en la política de Viedma y la presión llevó a determinaciones que no son buenas. En las cárceles de Viedma tienen que haber verdaderos asesinos, no gente inocente y trabajadora que tuvo un accidente", puntualizó.

"Si esta persona no hubiera sido un político de la zona, por ahí no pasa nada. Fue gravísimo, nadie discute eso, porque cuando hay la pérdida de una vida es gravísimo, pero no fue a propósito, fue sin querer", subrayó.

El abogado insistió en que el fallo del juez fue polémico: "A mí me llama la atención, porque no vi riesgo de fuga y más a sabiendas de que ella fue a reclamar un dinero y la Justicia sabía que habían 500 mil pesos y no 17 millones. La Justicia sabía que a esta persona le pasaba algo, por ahí la podían mandar a un psicólogo, pero sabían que no había 17 millones. La señora está mal y habló de muchas inconsistencias".

"Ella todavía está con inmensos dolores de cabeza y no sabemos si puede perder la vida adentro del Penal, porque ya le robaron todo, la apretaron un brazo y la hicieron arrodillar de dolor, la está pasando como si hubiera sido la peor de Viedma, y el accidente no fue a propósito", cerró.