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La Cámara Casación rechazó el pedido de genocidas para prisión domiciliaria
En un contundente rechazo a la impunidad, la Cámara Federal de Casación desestimó el pedido de dos abogados de represores para que aquellos mayores de 70 años tuvieran acceso al beneficio de la prisión domiciliaria. Este fallo, que llega justo en los días previos al aniversario de la última dictadura cívico militar, representa un golpe a las especulaciones sobre concesiones hacia los criminales de lesa humanidad.
El caso llegó a la Cámara de Casación a raíz de una solicitud realizada por los abogados Ricardo Saint Jean y María Laura Olea, quienes argumentaban que los genocidas envejecidos merecían permanecer en arresto domiciliario. En particular, hicieron referencia al caso de Diego Chemes, un represor que actuó en el centro clandestino de detención Vesubio y que se convirtió en el centro de dicho pedido.
En reiteradas ocasiones, los defensores de los procesados y condenados por delitos de lesa humanidad han intentado obtener concesiones de la Cámara de Casación. Incluso en el año 2022, habían solicitado una reunión con representantes de organismos de derechos humanos, sin éxito. Sin embargo, la determinación de este tribunal se mantuvo firme en el rechazo de cualquier beneficio para estos criminales.
¿Quién es Diego Chemes?
Se trata de un represor de 71 años que se encuentra detenido desde 2006. En 2011, el Tribunal Oral Federal número 4 lo condenó a 21 años de prisión. A pesar de haber obtenido el arresto domiciliario durante la pandemia en 2020, dicho beneficio le fue revocado en 2022. Posteriormente, la Sala IV de la Casación rechazó un nuevo pedido del represor.
La negativa a otorgar la prisión domiciliaria a genocidas de avanzada edad demuestra un firme compromiso por parte del sistema judicial en materia de justicia y es un mensaje contundente en la lucha contra la impunidad. Este fallo también evidencia la coherencia y la línea única que prevalece en las distintas Salas de la Cámara de Casación en lo referente a delitos de lesa humanidad.
En medio de un clima de incertidumbre y rumores de posibles concesiones hacia los represores, este rechazo de la Cámara de Casación es un importante paso hacia la consolidación de la verdad y la justicia.
