Este martes, la cooperativa de trabajo "El Avance" logró un importante comodato para hacerse cargo del funcionamiento del Proyecto Centro de Servicios para Agregado de Valor (CENTRO SEPAV), que se encuentra en el kilómetro 974 del Camino 5.

El mismo tiene como fin brindar el servicio de descascarado y tamañado de nueces y avellanas a todos los productores de la región.

El comodato tendrá un plazo de cinco años y brindará servicios a todos los agentes que integran la cadena de frutos secos de Río Negro y Neuquén.

Uno de sus principales objetivos es que se constituya como un espacio para el desarrollo y consolidación de nuevos productos con valor agregado.

El presidente de la cooperativa, Federico Amaro dialogó en Radio Noticias y expresó que en el centro "hay máquinas que pertenecen al clúster de frutos secos y nosotros trabajamos con esas máquinas desde 2018, respondíamos a la Cámara de Productores y hoy ya hace un año y medio que estamos constituidos bajo la imagen de una cooperativa, se firmó el contrato para el uso de las máquinas por cinco años y ayer hicimos la firma por el uso del inmueble".

En cuanto al progreso de los trabajadores, indicó: "Montar una cooperativa no es nada sencillo para alguien que lo desconocía, nosotros somos un grupo de seis personas que no teníamos noción de cómo hacerlo y fue sencillo gracias a Héctor Ressell (titular del área de Cooperativas y Mutuales), quien nos dio una mano grande. Una vez que hicimos el papelerío de la cooperativa, avanzamos bastante en lo administrativo, en la distribución de los cargos y hoy gracias a un montón de ayuda de gente que nos acercó estamos participando de proyectos".

En este sentido, continuó: "Gracias al INTA nos dieron los materiales para hacer dos mesas de selección manual y estamos participando por un ANR (Aporte No Reembolsable de la Nación) y si nos va bien vamos a contar con una envasadora al vacío, con una cámara de frío y con un elevador, porque este galpón donde estamos nosotros cuenta con una planta baja y una alta y se dificulta el uso de la planta alta porque cada lote de frutos secos es de 2 mil o 2500 kilos y es difícil usarla con ese kilaje".

Amaro destacó en conversación con Toca Madera: "La idea de la creación del Centro SEPAV fue agregarle valor a los frutos secos y que el productor se desentienda del proceso de post cosecha. Que el dueño de los frutos lleve su nuez o su avellana al galpón, que nosotros se la descascaremos, se la seleccionemos y se la envasemos, para que luego la retire y esté apta para la venta".

El convenio fue suscrito con el Instituto de Desarrollo del Valle Inferior.