El conductor de 53 años se fue de la pantalla chica para inmiscuirse en otra de sus pasiones, aquella que tenía olvidada hace 30 años atrás.

Mariano Iúdica es una personaje de la televisión argentina, su labor a lo largo de los ultimos 15 años en la pantalla chica lo puso como una persona pública y un conductor de suma calidad que supo hacerse su lugar en base a un estilo propio.

Primero creció baja el ala de Marcelo Tinelli, pero luego tomó vuelo propio en materia de ser animador de programas y su '!Dale!' trascendió a lo popular y quedó para siempre en el leguaje de los argentinos ese latiguillo que utilizaba Mariano al momento de darle la orden a un participante para que me comience su show de canto.

Así como su latiguillo, también quedaron en la memoria sus llantos de emoción a la hora de animar en Soñando por cantar o Laten Corazones entre otros éxitos. Su histrionismo lo hizo animarse a todo desde imitar a Sergio Massa en un Gran Cuñado allá por el 2009 a ser la cara visible de Polémica en el Bar, un programa emblemático de la tele argenta.

Hoy su actualidad lo encuentra fuera de la televisión y dedicado de lleno a su otra pasión, la gastronomía. Iúdica, junto a su mujer abrieron primero un restaurant en la zona norte del conurbano bonaerense y luego otro en Pinamar, para ya estar pensando en un tercero que será solo para cenas exclusivas.

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Lo gastronómico comenzó con una idea de su mujer Romina, quien lo tentó de abrir un restorant en un lugar estratégico y apuntado para todo tipo de comensales, pero viendo como atraer a un público, juvenil, escolar.

“El restaurant que abrimos se llama Gran Bamboo, que tiene un concepto muy novedoso ubicado enfrente de colegios que tenían salida a comer. La idea es que los chicos, en lugar de consumir la clásica empanada, hamburguesa o pancho, tengan un lugar bien para ellos, con pantallas, con WiFi. Que sea fácil y que la carta sea atractiva”, expuso Mariano.

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Luego agregó que se convención un día que le fue muy bien y su mujer Romina no dejó pasar la oportunidad: "Un día saqué como diez paellas a la vez y Romina me dijo ‘te tenés que quedar’. Desde los 22 años que no me metía en una cocina profesional. Nos ofrecieron después abrir otro en Pinamar, que es el Gran Bamboo Beach. Pronto voy a abrir el Gran Bamboo clandestino, que van a ser cenas privadas y para poca gente”.

Toda esta movida lo tiene a Mariano fuera de la movida televisiva, aunque adelantó que no está retirado ni mucho y que junto a sus dos hijas está pergeniado una linda vuelta a la pantalla chica, haciendo una mixtura entre sus dos pasiones, la tele y la cocina.

"Voy a volver con mi propio programa culinario, con mi hija Bernarda que volvió de Europa y con mi otra hija, Valentina, que es una productora estrella. Estamos armando algo en Kuarzo como lo que fue ‘Iúdica al Dente’”, concluyó.