El año pasado, en Viedma, se le comenzó a dar forma a un proyecto para contener a hombres en situación de calle. Se trata de un inmueble que está en las instalaciones del colegio Paulo VI (frente al CURZA) y que fue cedido en comodato por parte del obispado para este propósito. Al estar abandonado, hubo que hacer arreglos, cambios de materiales, y está próximo a su inauguración. Sólo falta comprar los muebles, sobre todo las camas para recibir a aquellas personas que se acerquen.

El tiempo apremia, sobre todo, porque ya llegó el frío y pasar las noches a la intemperie no es nada grato. Sin ir más lejos, la semana pasada se conoció el caso de un hombre que está en la calle y que por las noches duerme en las instalaciones de un banco de la ciudad, acurrucado cerca de los cajeros automáticos. 

A raíz de esto, para saber un poco más sobre cómo será la implementación, Radio Noticias (105.5) charló con el secretario de Desarrollo y Articulación Social de Viedma, Mario Sánchez. “La semana pasada firmamos el convenio de cooperación y colaboración con la provincia”, dijo y agregó: “Lo refaccionamos, lo pusimos en valor con recursos del municipio, y ahora, en función de esta posibilidad que nos ha dado la sanción de la ley provincial, donde la provincia también está involucrada en la atención a personas en situación de calle es que hemos podido avanzar con este convenio”.

“En este momento estamos iniciando las compras de lo que sería el mobiliario y el equipamiento del lugar, y solicitando que nos acompañe la provincia con estos recursos, y en esa instancia estamos”, remarcó Sánchez.

Con respecto al espacio, sostuvo: “El lugar consta de 5 habitaciones, tiene 3 baños, y una cocina comedor grande, una galería y una oficina de acceso”. Remarcó que todavía no hay una fecha precisa para que comience a funcionar, pero que se está trabajando lo más rápido posible. “Hubo que hacer obras. Muchas más de las que nos parecía y eso nos llevó un poco más de tiempo, pero la idea es poner un plazo corto: un mes”.

Más allá del equipamiento, también se van a necesitar operadores que reciban a los que vayan, que los ubiquen y les den cierta contención. “Estamos en la búsqueda de esos perfiles dentro de la planta, y si eso no surge, vamos a tener que buscar afuera, pero la idea es conformar un equipo de trabajo que tenga una coordinación y que tenga operadores”.

“Si bien vamos a comenzar como un hogar de pernote, las personas van a poder ingresar a las 19 y salir al otro día a las 9 de la mañana. Eso va a implicar que se puedan dar una ducha, puedan cenar, y dormir en una cama adecuada. No va a funcionar las 24 horas, vamos a arrancar con ese esquema hasta que podamos ir completando todo el dispositivo que tiene que ver con la atención de situación de calle”, informó.

Sobre esta cuestión, con la ley de por medio, sostuvo: “Vamos a tener algunos operadores de calle también, pretendemos un acompañamiento y un seguimiento, trabajando complementariamente con otros organismos, como el área de Salud Mental, la agencia APASA (Agencia para la Prevención y Asistencia ante el Abuso de Sustancias y las Adicciones), el ministerio de Trabajo, y demás. La idea es ir escalando este proyecto”.