CONTROL DE ALCOHOLEMIA EN VIEDMA

| 16/05/2023

Es recomendable soplar la pipeta porque desde ahora, negarse duele más al bolsillo

Es recomendable soplar la pipeta porque desde ahora, negarse duele más al bolsillo

Los últimos controles de alcoholemia en la ciudad determinaron un total de ocho infracciones a las ordenanzas de tránsito por ese rubro específico, pero en los procedimientos, los inspectores de la Agencia de Seguridad Vial se encontraron que una persona se negó al test.

De acuerdo a la normativa vigente, el hecho de negarse, y desde hace mucho tiempo, los Estados toman esa decisión individual del presunto infractor como si estuviera borracho. En consecuencia, en Viedma se labran las actas incluyendo cargar al automovilista no sólo con la multa sino también un costo de 3.360 pesos en concepto de acarreo del vehículo hasta el corralón municipal y 2.160 pesos por cada día de permanencia en el predio.

Frente a este tipo de situaciones y controversias puntuales, el Juzgado Administrativo de Faltas de la Municipalidad de Viedma, acaba de adoptar un criterio distinto desde el punto de vista de las sanciones pecuniarias a fijar.

Quien se negaba al control tenía un monto mínimo de multa, y según el último código tarifario aplicado tras la sanción de la ordenanza para el ejercicio 2023 en el Concejo Deliberante, el castigo al bolsillo implicaba 82.000 pesos.

Sin embargo, las autoridades decidieron elevarlo a 90.000 pesos como nueva modalidad basándose en el fundamento de que la persona responsable de un volante o un manubrio de moto, acepte en forma voluntaria someterse al test, y así determinar en forma fehaciente, la graduación alcohólica con la que conducía en la vía pública poniendo en riesgo su propia humanidad y la de terceros.

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