Una mujer denunció que fue golpeada en un bar clandestino de Patagones. El hecho ocurrió en la calle Ángel Pacheco al 600, y allí funcionaría este reducto nocturno que no tendría habilitación para tal fin. Según contó la hija de la víctima, el episodio que tuvo a su madre como protagonista sucedió el sábado 25, alrededor de las 5 de la mañana.

En un momento, ella fue al baño y cuando salió, una mujer de nombre Anahí (sería una de las dueñas), la llamó desde la puerta que da al patio. Cuando la víctima se acercó apareció un hombre (Ángel-el otro dueño), la sacaron afuera para hablar. “Cerraron la puerta para que no salga. Cuando cerró y quedaron los tres solos, ya mi mamá sospechó algo raro”, comentó su hija.

Sobre los hechos en sí, puntualizó: “Anahí le empezó a decir a mi mamá qué le pasaba, todo el tiempo desafiándola a mi mamá, como buscando pelea. Como ella no reaccionó en ningún momento le empezó a pegar igual. Ángel la agarró de atrás, los brazos, para que no se pudiera defender. En un momento agarró un palo y le pegó tan fuerte que mi mamá se desvaneció. Igual le siguió pegando”.

¿Cómo salió de ahí? “Por la música no se escuchaba nada, pero justo a una persona se le dio por ir al patio, escuchó y empezó a gritar que estaban matando a una persona. En ese momento dejaron de golpearla. Con ayuda de otras personas pudo regresar, pero fue una tortura, un intento de homicidio”.

Ya en su propiedad, un familiar, al verla en esas condiciones, y teniendo en cuenta que se había desvanecido, decidió llamar a una ambulancia. La trasladaron al hospital, constataron los golpes y tuvieron que ponerle puntos en una herida cerca dela ceja. A raíz de esto, hizo la denuncia policial.