Una onda preocupación invadió este fin de semana a los residentes en el balneario El Cóndor al tomar estado público que el patrullero de la Comisaría 34º de esta capital volvió a su lugar original luego de prestar servicios en la villa marítima durante la temporada veraniega, principalmente constituyendo un importante servicio de apoyo durante la Fiesta Nacional del Mar y del Acampante.

La inquietud vecinal que comenzó a crecer como reguero de pólvora está vinculada con diversos hechos delictivos que se sucedieron en las últimas horas, algunos los cuales, lamentablemente los propios damnificados no se presentan en la unidad policial a dejar constancia de lo ocurrido.

Por caso, la "entradera" de hoy, según trascendió, hubo un aviso de los vecinos a la policía pero la propietaria no se encuentra en Viedma. Entre el viernes y el sábado, los delincuentes ingresaron a una vivienda de donde sustrajeron un televisor de 51 pulgadas, y al parecer el hurto estuvo en conocimiento de la policía.

Desde el fin de semana, el único patrullero disponible es una camioneta Ford Ranger 2013 que de acuerdo al informe vecinal no se encuentra en buenas condiciones, y además en la villa marítima hay antecedentes de los problemas de movilidad con que cuenta la policía.

A fines de enero de 2022, se le entregó a las anteriores autoridades de la unidad una flamante camioneta Nissan Frontier que tuvo que ser llevadas a los talleres de la terminal automotriz por fallas de fábrica y aún no fue regresada a la repartición. El automóvil Nissan cuando fue prestado por las autoridades de la 34º tuvo que ser sometido a reparación en la villa por iniciativa de los vecinos como para que pueda cumplir sin problemas su cometido de patrullar el amplio sector del balneario.

El Cóndor resguarda otro historial poco feliz cuando otra Ford Ranger quedó bajo el agua en el mar en 2018 cuando efectivos de la unidad buscaban a un desaparecido, y luego del rescate quedó bastante deteriorada.