Lionel Messi, Ángel Di María y Paulo Dybala llegaron al aeropuerto internacional de Rosario el martes por la tarde. Inmediatamente, ambos rosarinos se subieron a un helicóptero que los llevó a sus hogares. Por su parte, La Joya hizo escala y continuó su viaje rumbo a su Córdoba natal.

“Olé, olé, Messi, Messi”, cantaban quienes se acercaron al aeropuerto para darles la bienvenida. Sin embargo, debieron conformarse con verlos desde lejos. Los empleados con permiso para estar en la pista tuvieron suerte, ya que pudieron tomarse fotos con los campeones.

Lio llegó a Funes, muy cerca de Rosario, donde tiene una casa en un barrio privado. Dos días después de haber conquistado el Mundial Qatar 2022 con la Selección argentina, y luego de una intensa jornada de festejos en Buenos Aires, comenzó con su descanso antes de reincorporarse al PSG.

El capitán y estrella de la Selección tuvo un gesto muy especial con los hinchas que lo esperaron en el barrio privado. Cientos de personas aguardaban para poder saludarlo y, a pesar del cansancio por todo lo que vivió, saludó a todos los presentes, uno por uno.

Para que la situación no se salga de control, las fuerzas de seguridad prepararon un operativo en el lugar, que incluyó un amplio vallado y custodia permanente. Antonela Roccuzzo y sus hijos, Thiago, Mateo y Ciro, junto a los papás de Messi y otros familiares, ya se encontraban en su hogar a la espera de su arribo.

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