Un estricto control de los efectivos del Cuerpo de Seguridad Vial de esta capital permitió disminuir el riesgo de alcohol volante durante el fin de semana último, según revelaron fuentes de la Jefatura de la Policía de Río Negro.

El hecho de sacar a un borracho de la vía pública se concretó en la madrugada del sábado en el destacamento Base 80 de la ruta nacional N°3 en la bajada del puente Basilio Villarino, de acuerdo a lo que trascendió en forma pública en las últimas horas.

Al parecer, el conductor se trasladaba desde Patagones hacia esta capital cuando fue detectado por los efectivos. Una vez que se le hizo el test de alcoholemia, el equipo determinó que tenía 0,64 gramos por litros de sangre. Con estos datos, se hizo bajar al conductor del rodado y su vehículo –una camioneta Ford Ranger- quedó retenido en el lugar tras lo cual se realizó el acta contravencional correspondiente.