El referente de la cámara y productor de frutos secos del Valle Inferior de Río Negro, Alejandro Arancio destacó la puesta en marcha de una nueva edición de la Fiesta Provincial de los Frutos Secos y también se refirió a la situación actual de la actividad.

En conversación con NoticiasNet, el productor sostuvo que “estamos muy contentos con la puesta en marcha de esta nueva edición porque esto es algo que comenzó muy tímidamente y hoy vamos por la octava edición”.

Para este sábado y domingo “esperamos tener la respuesta de la gente, que venga y disfrute de los puestos de venta, de los números artísticos, de las clases de cocina y charlas sobre nutrición, esperemos que a todos le guste la propuesta”.

Economía

Consultado por la actividad, Arancio señaló que “la de los frutos secos es una actividad que ha venido creciendo. No obstante este año particularmente está siendo complicado económicamente”.

Según explicó, “hay una crisis de mercado por el tipo de cambio no competitivo y eso ha generado que no se pueda exportar. Entonces toda esa nuez se volcó al mercado interno, pero en este mercado se están pagando los mismos precios del año pasado, con aumentos siderales en lo que es fertilizantes y demás costos de producción”.

Por lo expuesto, la balanza económica no está siendo positiva para los productores de nueces, motivo por el cual muchos se volcaron a la avellana.

“Este es un momento particularmente difícil, más allá de que la actividad vino creciendo porque era un sector que tenía buena rentabilidad, este año se ha estancado para la nuez, no es el caso de la avellana que se ha comercializado internamente, entonces no tan afectada por la exportación”.

Para el año que viene, en tanto, “esperemos que cambie el panorama económico y se pueda exportar, que esto se normalice porque otro año como este sería catastrófico”, aseguró el productor.

De todos modos, más allá de la situación económica adversa, en el valle inferior “continuamos apostando y poniéndole valor agregado a la producción.  De hecho lo estamos haciendo, tenemos un centro de pelado de avellanas que funciona en El Juncal”.

Para finalizar, el producto afirmó que “el fruto seco es algo que uno lo planta y queda casado por mucho tiempo, por al menos 20 años y eso demanda mano de obra y hay trabajos que no se pueden dejar de hacer, pero eso también genera empleo”.