Personal de la Comisaría 34°, luego de solicitar refuerzos, pudo demorar inicialmente a tres individuos quienes ingresaron subrepticiamente a un estacionamiento de un supermercado de Álvaro Barros al 1440. De allí, sustrajeron una bolsa conteniendo 10 kilogramos de chorizos que minutos antes había depositado el comprador en la caja de la camioneta mientras se disponía a retirar del lugar.

El damnificado, rápido de reflejos avisó a la policía, y el móvil 2618 siguió tras ellos y poco les duró el deseo de comer chorizos.

A apenas dos cuadras en la calle Colón  -a la altura de la escalera 15 del barrio 20 de Junio- los ocupantes del patrullero los interceptaron quedando en calidad de demorados, sin embargo como el trío se separó, uno de ellos rompió el cordón policial logrando escapar. 

Luego un sargento de la Policía de Río Negro pidió a personal de calle que lo asista para trasladar a los delincuentes a la mencionada unidad policial. 

Una vez en la comisaría se supo que uno de ellos es mayor de edad quedando detenido, en tanto que la otra persona al ser menor de edad fue enviado a un Centro de Admisión y Derivación (CAD) dependiente de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF). Una vez que tomó intervención la fiscal en turno Maricel Viotti, se decidió que el menor sea entregado a su madre.