El conocido delincuente Lucas Pazos, fue detenido este martes en la provincia de Buenos Aires, en un control de tránsito y prontamente será trasladado a Viedma.

El peligroso ladrón se había cortado la tobillera que tenía por la causa del millonario robo a Pozzo Ardizzi y se dio a la fuga.

El atraco en cuestión ocurrió en febrero de 2021, cuando un empleado de la principal distribuidora de combustibles iba en un vehículo con más de tres millones de pesos en efectivo, y fue interceptado entre las calles Ministro Jofré y Almirante Brown.

Los delincuentes a bordo de un Fiat Uno negro chocaron al Ford en el que circulaba el recaudador, le tiraron gas pimienta y se llevaron un bolso lleno de dinero. Luego, los malvivientes huyeron a bordo de una motocicleta.

La maniobra de los ladrones, con una alta planificación, fue bastante osada porque el Fiat quedó con serios daños en su parte frontal y podrían haber sufrido heridas de gravedad.

Tres días después, la Justicia imputó a Pazos, el único identificado porque el auto estaba a su nombre, un pequeño error en un plan casi perfecto.

El 16 de agosto del mismo año se cortó la tobillera y huyó.

La última novedad de su presencia había sido en Bariloche, cuando iba con otros dos ladrones.

La información de los sujetos circuló rápidamente y se viralizó a través de distintos grupos de WhatsApp. Los receptores, en su mayoría, desconfiaron del origen de la información aunque los datos fueron confirmados por fuentes policiales.

Allí iba con malvivientes oriundos de San Antonio Oeste, quienes también están implicados en numerosos expedientes policiales y judiciales por distintos hechos delictivos, varios de los cuales tienen relación con el narcotráfico.

Los sospechosos se movilizaban en dos vehículos: un VW Gol blanco y un Honda Civic gris, de acuerdo a los datos que circularon a través de las redes sociales.