La fiscalización sobre anomalías en seguridad e higiene cosechó buenos resultados para el municipio capitalino durante el fin de semana último, en el marco de la actividad que desplegó el cuerpo de inspectores.

Por encargo de la Subsecretaría de Protección Ciudadana, los inspectores visitaron una suerte "kiosco" gastronómico instalado en Zatti al 200.

Allí, labraron un acta de infracción en virtud de que el local no se encontraba habilitado ya que además estaba funcionando una venta de choripanes al paso. Además, la mercadería que se ofrecía en venta no contaba con ningún tipo de documentación.

Paralelamente, fue clausurado un local nocturno en la zona céntrica en virtud de que estaba habilitado como cantina y se estaba realizando una reunión danzante. De acuerdo al criterio oficial, los propietarios habían sido advertidos previamente de esta situación.