27/04/2022

El grito desesperado de una mamá por lo que vive con su hijo: “Somos ignorados”

Fernanda decidió hacer público el caso luego de miles de denuncias en los lugares que corresponde y no ser escuchada.

El grito desesperado de una mamá por lo que vive con su hijo: “Somos ignorados”

Las noticias sobre la pésima manera en la que se maneja en Viedma se multiplican. En las esquinas se aplica la ley del más fuerte, se conduce con el auto pegado al de adelante, lo que lleva a que este sea uno de los choques más frecuentes, cuando el de adelante frena, y más.

Pero todo tiene un límite y es cuando ni siquiera se respetan las normas de convivencia. Un claro ejemplo lo tenemos en la Escuela 347, ubicada en Roca y 25 de mayo, en Viedma. Allí hay dos advertencias para los automovilistas.

Por un lado, una línea amarilla que indica que no se puede estacionar. Sepa entender la aclaración, estimado lector, pero hay vecinos que parece que no saben y no está mal refrescarlo. Por otro, un cartel que dice que es un espacio exclusivo para personas con discapacidad en horario de escuela.

A ese establecimiento acude un nene con movilidad reducida y  ese espacio fue pedido para que sus padres puedan llevarlo y estacionar cerca. No tener que hacer largas distancias con el chico en silla de ruedas, pero las hacen, porque el lugar siempre está ocupado por otro auto.

“Mi hijo tiene discapacidad motriz, contamos con el estacionamiento exclusivo pero nunca se respeta, todos los días es un caos. Tengo que pelear con todos los que ocupan el lugar que me corresponde por ley. Los ignorantes de turno van y estacionan ese lugar, sin tener justificación, mientras yo tengo que estacionar a 2 cuadras con mi hijo que usa silla de ruedas”, comentó Fernanda a NoticiasNet.

A esta altura, ya conoce a todos los infractores, porque el tema es sistemático: “Los que estacionan en ese lugar trabajan en la administración pública o van  a hacer algún trámite por ahí cerca. Hay un cartel que indica que no se puede estacionar, pero nunca lo ven”.

Por otro lado, comentó que los reclamos ya se hicieron, pero no hay respuestas: “Tanto la escuela como yo hemos solicitado, hasta implorando que pongan inspectores en esa esquina, que es un caos, pero nada.  Somos ignorados. Hice miles de denuncias tanto al señor José Vilca como al 911, pero nada. ¡Nunca responden! Es una vergüenza, los inspectores paseando por todo el centro de Viedma. Me cansé, necesito hacerlo público para que la gente entienda y respete los lugares como corresponde”, finalizó.

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