La lluvia que cayó durante la última semana hizo que la tierra no pueda absorber de la manera adecuada y en algunos barrios hizo estragos. En uno de los que se sintió fue en Barrio Norte, sobre todo en la calle Camila O’Gorman, casi en su totalidad, desde Cabral hasta su finalización.

El nivel de agua hizo que se filtrara en las cloacas y que los inconvenientes se vieran en las viviendas. En muchos casos, desde hace unos días no pueden utiliza el inodoro porque apenas tiran agua las rejillas rebalsan.

Los reclamos a ARSA se multiplican, pero nadie les da una solución. Hasta el viernes 21 no había novedades, llegó el fin de semana, las oficinas están cerradas, y poder llegar a alguien es mucho más engorroso aún.

Sin embargo, siguen insistiendo al teléfono de emergencias, pero tampoco hay respuestas, claro. En el mientras tanto, deben convivir con una situación compleja y desesperante.