El "Zorro" Monge va a ser declarado Ciudadano Ilustre: "Estoy disfrutando los homenajes en vida"

Néstor el "Zorro" Monge perdió más peleas de las que ganó y nunca consiguió un título oficial. En la década de 1987 a 1997 se subió al ring en 60 oportunidades, de las cuales salió victorioso en 25 (16 por nocaut), perdió 29 (8 por la vía rápida) y empató 6.

Esa estadística tiene que ver con que siempre le hizo frente a cualquier contrincante, nunca especuló. Si lo invitaba a pelear "Maravilla" Martínez o Floyd Mayweather al menos un golpe les iba a tirar.

Su rapidez en el cuadrilátero le hizo valer de su apodo de "Zorro". Pero él mismo reconoce que se ganó a la gente una vez que se retiró. Consiguió quizás el mejor trofeo de todos: el del campeón del pueblo.

Ya no recuerda cómo empezó esa conexión con los vecinos, pero cada vez que sale a correr o simplemente va a comprar a un almacén todos le tocan bocina. "Eh, campeón", "Zorrito", son algunos de los gritos que se escuchan en cada esquina. Él les contesta a todos y les tira besos. Recorre 15 kilómetros por día y ya ni sabe cuántos saludos obtiene.

Tal comunión llevó a la iniciativa de declararlo Ciudadano Ilustre de Viedma, por parte de la concejala Zulma Romero (Frente de Todos).

Un periodista de este medio encontró a Monge corriendo en el Boulevard Ituizangó, con bocinazos en cada cuadra. Posó para unas fotos casuales con guantes de albañil, nos invitó a su hogar que a pocos metros tiene un mural especial con su cara, y luego contó sus sensaciones por la propuesta de ser Ciudadano Ilustre. Al lado estaba su inseparable compañero: su perro Tyson, un pitbull que todavía no le mordió la oreja a nadie pero lo cuida al "Zorro" como a su mejor amigo. 

En cuanto a la propuesta deliberante, reconoció que "fue una sorpresa enorme porque no me imaginaba que después de que me retire iba a tener tantas cosas lindas" y destacó: "Estoy disfrutando los homenajes en vida porque todos los reconocimientos vienen después de muerto y yo los estoy disfrutando hoy".

"La gente me sorprende, los niños también me dan besos y me saludan, eso lo hace Dios. Todo esto de las bocinas comenzó después de que me retiré, cuando vos te retiras la gente se olvida de vos y conmigo es distinto porque me sacan fotos, me filman, me hicieron un mural... ¿qué más puedo pedir?", comentó con emoción.

Asimismo expuso que "lo que yo hago ahora jamás lo hice cuando estaba en actividad, cuando me di cuenta que causaba admiración me entré a cuidar, bajé de peso, entreno todos los días para ser ejemplo de la gente que viene. Este deporte no es joda, lo agarras en serio o no".

"Estoy muy contento con todo lo que me pasa porque me pasan muchas cosas lindas en la calle", sostuvo y citó como sus referentes al "Roña" Castro y el "Látigo" Coggi "porque son gente con muchos huevos".

En cuanto al pugilismo local, precisó: "Hoy está medio apagado y no hay figuras". Incluso en los eventos importantes el aplausómetro revienta cuando el propio "Zorro" aparece vestido de gala y saluda a todos los espectadores.

Mientras que a sus 55 años sigue dialogando con chicos que son amantes de este deporte y trata de que todos mantengan sus pies sobre la tierra. "Cacho" Farias, su nieto, es uno de los que sigue sus consejos.

Entre las victorias de Monge, figuran los combates contra Néstor Berra en Trelew, José Llanquín en Mendoza, Daniel Mejuto e Hipólito Caucota en Viedma, Ricardo Guevara en Caleta Olivia, Raúl Barrenechea en Buenos Aires y Omar Alegra otra vez en la capital rionegrina. También ganó en los cruces contra Ramón Crespín en Bahía Blanca, Néstor Paz en General Roca, Ángel Castro en Cutral Có, Cirilo Figueredo en Bahía y Miguel Canedo, Jorge Blanco, Héctor Rojas y Víctor Chilo en Viedma. Es decir que triunfó en varios puntos del país.

Muchos de los que le ganaron hoy permanecen en el anonimato, mientras que el "Zorro" nunca pasa desapercibido.