Fraudes telefónicos: salvan una mujer en Patagones

Las probabilidades de que una persona mayor sea el blanco de un fraude telefónico se incrementan de forma significativa, pero esta vez, la historia tuvo un final feliz.

Un hombre esperaba en la fila de un cajero automático, en pleno centro de la ciudad maragata. Observó que delante de él, una mujer mayor, titubeaba con el teléfono celular en la mano, y el altavoz en pleno funcionamiento.

El hombre escuchó la comunicación entre la mujer y un sujeto. Éste,  le solicitaba que cambiara la clave bancaria. En forma solidaria, el vecino se acercó y le sugirió que corte la comunicación porque se trataba de una presunta estafa.

La dueña del teléfono no entendía nada pero aceptó la recomendación. Cuando se repuso del shock, reconoció ante el vecino que le habían ofrecido un supuesto bono de la empresa YPF y que se lo tenían que depositar.

En consecuencia, zafó de una situación embarazosa y de la estafa, en virtud de que ya hay bastante gente prevenida, y además la empresa YPF -como la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES)- están siendo objeto en forma permanente en este tipo de artilugios.