Casas construídas en 3D ¿alternativa, futuro o realidad?

Aunque parezca innovador, el tema no es nuevo, ya en 2013 la empresa china WinSun había logrado imprimir en 24 horas 10 casas, con ayuda de personal humano. Con el tiempo la experiencia se trasladó a  Rusia, ahí  la empresa Apis Cor levantó una casa de 38 metros cuadrados en apenas 1 día.

Durante la construcción, la verdadera innovación estuvo en la máquina que era capaz de imprimir capas sucesivas de cemento que posteriormente fueron reforzadas de manera manual con varas de fibra de vidrio.

El clima y sus variantes

El diseño seleccionado para este prototipo fue circular, de esa manera era más fácil mostrar las cualidades de la innovación. En la primera construcción fue en invierno, lo que le sumaba un elemento al reto, para lograr el objetivo utilizaron una carpa protectora que permitiese mantener una temperatura de 5º evitando así la congelación del hormigón, quedando como tarea futura utilizar geopolímeros resistentes a cualquier temperatura. Después se agregaron elementos como aislantes, cubierta, instalaciones, carpinterias y acabados. 

Fuera de este mundo

En su momento la NASA hizo un concurso para arquitectos e ingenieros y pensar juntos en un tipo de vivienda para construirla fuera de nuestro planeta. El prototipo ganador consta de 3 metros de altura, en sus materiales se destaca el basalto biodegradable y reciclable derivado de materiales naturales encontrados en el planeta Marte. En ese sentido la NASA apoya los estudios de viabilidad del proyecto.

 ¿Qué podemos tener a favor con las construcciones 3D?

-Precisión: en vista que gran parte del trabajo es realizado por software y máquinas, disminuye el marge del error. 

-Costos: la primera casa habitada, impresa en 3D, costó un 20% menos que si se hubiera hecho por métodos tradicionales - y la estimación es que ese costo baje un 25% en cinco años y hasta un 40% en 10 a 15 años. 

-Rapidez: es posible agilizar la construcción en corto tiempo. 

-Materiales ecológicos: abre una oportunidad para elementos en sintonía con la arquitectura sustentable. Las impresoras 3D pueden combinar  materiales como arena, concreto, fibras y reciclados.

¿Qué tenemos en contra?

-Únicamente muros: por lo pronto las impresoras 3D son capaces de imprimir sólo muros, el resto de los componentes como los techos o acciones como incorporar instalaciones, tuberías, puertas, ventanas, aún sigue en desarrollo.

-Inversión costosa: para las empresas que desean incursionar en el rubro, la inversión inicial es muy  grande por lo que este tipo de emprendimiento sigue en una fase exploratoria.

-Mano de obra: al ser un rubro nuevo, todo está por hacerse, por lo que la mano de obra calificada y con experiencia está en plena formación.   

-Altura: a la fecha las construcciones con esta tecnología no permite hacer estructuras muy altas.

Fuentes: cosasdearquitectos.com / plataformaarquitectura.cl/ YouTube