24/10/2020

El juego: un camino para explorar la vida

En cada etapa el juego ayuda a construir lo que será la persona en su edad adulta

 

En la infancia el juego constituye una herramienta para experimentar el mundo, una pieza clave en el desarrollo en la que se establece la relación con el mundo, por ese motivo estimular su presencia en cada espacio de la vida de nuestros niños y niñas es clave. 

 

Durante la edad temprana, aprender jugando es una máxima que atraviesa la vida y puede estar presente desde las artes plásticas, la música, la literatura, geografía, teatro, matemáticas, la poesía, lo lúdico es posible incorporarlo para darle un toque ameno a la formalidad escolar. 

 

¿Qué nos brinda el juego?

 

- Los primeros objetos de juego del bebé son su propio cuerpo, el de su madre, las babas, el alimento, los elementos de su higiene, la ropa y cualquier objeto a su alcance.

 

- Mediante el juego cada niño/a investiga, explora y descubre el mundo que le rodea y así mismo/a.

 

- El juego es su medio de expresión, comunicación y elaboración de conflictos. Repite simbólicamente situaciones placenteras y penosas, exteriorizándolas, poniéndolas fuera, intentando dominarlas a través de su actividad.

 

-La manipulación de materiales y objetos es una base fundamental para el desarrollo de su capacidad lógica y simbólica.

 

-Jugando se inicia en los roles que podrá desempeñar en el futuro.

 

-En la infancia se tiene la capacidad espontánea para crear juegos, como arrojar cosas fuera de su alcance, taparse con la sábana, esconderse, meter objetos en agujeros, abrir y cerrar puertas y cajas. 

 

- La familia al dedicarle tiempo para jugar e incorporar el canto, le permite a cada niño/a fortalecer la construcción de su mundo de fantasía.

 

 

La mejor manera de incentivar y valorar el juego es compartiendo la experiencia, muchas veces cuando en la infancia se pide un juguete realmente se está pidiendo es la atención y amor de su adulto más cercano, por lo que brindar las herramientas, junto al acompañamiento en cada etapa de la vida resulta enriquecedor para sentar las bases de su vida.

 

Valorar la capacidad lúdica de nuestro hijo es facilitarle una actividad adulta más satisfactoria y gratificante.

 

Foto Pixibay 


 

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