Espejos en la casa: de lo estético a lo energético

Es innegable que los espejos son la mejor manera de hacer que un ambiente se vea más amplio y luminoso, sin embargo, además de ser funcionales, son grandes objetos de decoración que pueden ser usados para sumar personalidad a tu hogar. Además, según el Feng Shui, son objetos que irradian y reflectan energía Qi de los ambientes. 

Agregar a tu living espejos circulares, rectangulares, grandes o pequeños, puede ayudarte a hacer que tu casa luzca nueva y moderna. Según Pinterest los espejos volvieron a ser tendencia, con un 35% de aumento en las búsquedas realizadas desde enero.

La energética

Los espejos son protagonistas en leyendas y cuentos infantiles, son convertidos en objeto mágico, al proyectar imágenes que ocurrieron en el pasado o que ocurrirán en el futuro. Por su poder de reflejar la realidad, fueron desde la Antigüedad considerados como símbolo del conocimiento, de la verdad y de la “claridad”.

Según Patricia Traversa, especialista en Feng Shui,“originalmente, los espejos eran considerados por el Feng Shui como elemento metal, debido ha que se pulían sobre este material, pero actualmente, al fabricarse con vidrio, activan la energía del agua. Además de este aporte energético al ciclo de los cinco elementos, el espejo es usado como una cura”.

“Bien ubicado, el espejo sirve para recuperar zonas ausentes, activar sectores débiles, disimular formas agresivas, ampliar espacios reducidos, multiplicar simbología propicia, desviar energía. También es útil para que la persona que se halla de espaldas a la puerta pueda ver reflejado a cualquier intruso”, asegura.

Por el contrario, “un espejo mal colocado puede desequilibrar el Qi ambiental. Por ejemplo, los espejos rotos, desgastados u opacos se convierten en emisores de Sha Qi o energía dañina, igualmente aquellos que aún estando en perfectas condiciones reflejan imágenes desfavorables”.

Dónde no van

• Cuidado con los espejos que deforman la imagen (biselados, con aumento, pintados sobre la superficie) o con aquellos con tintes grisáceos u oscuros (desactivan la energía vital del lugar y proyectan una energía corrupta, oscura), también con los espejos muy antiguos, especialmente si pertenecieron a lugares o personas que no tuvieron buen Feng Shui.

• No se recomiendan aquellos con bordes irregulares en punta: emiten flechas envenenadas, es decir, energía hostil, agresiva, tampoco si están rotos, sucios, o con humedad.

• En los dormitorios su uso está muy restringido porque las energías electromagnéticas se amplifican por acción del espejo y afectan las horas de descanso, y por lo tanto, la salud. Nunca deben reflejar la cama.

• Al final de una escalera: colocar un espejo en la parte de arriba dificulta la permanencia de la energía y crea rebotes desfavorables. Tampoco se recomienda al final de un pasillo largo, acelera el Qi convirtiéndolo en Sha Qi.

• Enfrente de la puerta de la cocina: el espejo nunca debe reflejar al fuego porque duplica peligrosamente su energía Yang.

• Enfrentado a la puerta de un cuarto de baño, duplica la fuga de energía propia de estos ambientes.

• No poner espejos enfrentados, ni formando ángulo: en estas situaciones se generan rebotes luminosos que provocan Sha Qi. 

• Cuando refleje sectores sin armonía: una canasta de ropa sucia, latas de basura, cables eléctricos y tomas de corriente, papeles archivados como diarios y revistas.

• Los espejos no deben colgarse demasiado bajos, la altura ideal es 1,70 m desde el piso, porque si no pueden “cortar” la cabeza de quien se mira en él generando sentimientos de baja autoestima.