10 lugares ideales para poner un biombo
Tan exóticos y sugerentes como elegantes, los biombos vuelven a conquistar la decoración.
Aunque los primeros biombos encontrados (siglo III a.C.) se han hallado en China, es Japón el país que más los popularizó a partir del siglo VII.
De hecho, el término "biombo" lo adoptamos del homónimo portugués y este a su vez proviene del japonés "Byōbu" que está compuesto por "Byō" (protección) y "bu" (viento), haciendo referencia a su función principal, evitar que entraran corrientes en las habitaciones, aunque desde el comienzo sus hojas se adornaron con paisajes y cubrieron con materiales preciosos como el pan de oro, el nácar o la laca.
En algunas ocasiones los vemos ocultando espacios o dándoles privacidad.
En otras, dejándose ver y dando presencia a lo que se sitúa delante de ellos. En esta selección te damos 10 ideas para que los coloques en algún rincón de tu casa, más allá del dormitorio, y montes una buena escena.
Admirar el paisaje: Un biombo con un paisaje es perfecto para situarlo detrás de un sofá. Además de aportar un toque arty muy elegante dará profundidad al espacio.
Secretos de alcoba: Te recomendamos que lo cuelgues detrás de la pared de tu cama a modo de cabecero, tal y como hizo el interiorista Alberto Ribera con este ejemplar del siglo XIX. Coco Chanel era una obsesionada de los biombos.