Realizaron una marcha contra el maltrato animal

Decenas de personas se manifestaron por las calles del centro de Viedma para pedir por la plena implementación de la Ley 14.346 contra el Maltrato Animal.

En esta ocasión, se requirió justicia por el caso Lobo, un perro que fue asesinado a balazos en el barrio 1016 Viviendas el pasado 9 de julio y por Estela, una perra galga de Fernández Oro que fue arrastrada desde un auto unas 10 cuadras y finalmente falleció.

Los manifestantes también pidieron que haya severas multas respecto a los casos de crueldad animal que se viven a diario y que cuentan con la complicidad de la omisión estatal. 

Además, se sumó el caso nacional de Rubio, un can que vivía en una estación de servicio de la ruta Interbalnearia 11 frente a la entrada de la 58, Mar del Tuyú. Justamente el hecho fue el 13 de agosto pasado y se eligió esta fecha al conmemorarse un mes de este criminal episodio. 

El 13 de agosto se cruzó con su asesino, que paró a cargar nafta en esa estación, trató de tocar a Rubio y el animal intentó morderlo. Con la excusa de llevarlo a un  centro de zoonosis, Guillermo Adrián Rodríguez lo cargó en su camioneta, metros  después sacó una soga de su 4x4 y ató al perro del cuello. Apretó el acelerador y a toda velocidad arrastró al animal. Fueron más de dos kilómetros y lo dejó tirado.

El caso del perro que fue atado y arrastrado en el paragolpes de una camioneta por Adrián Rodríguez se encuentra judicializado y bajo investigación en los tribunales de Dolores por la fiscalía de la Unidad de Decisión Temprana de los Conflictos Personales (UDT) y la comisaría 5ª del partido de La Costa, donde las empleadas de una estación de servicio radicaron la denuncia.

Días atrás, incluso, concejales de La Costa aprobaron por unanimidad una resolución que declaró persona no grata a Rodríguez para repudiar "el accionar criminal" y señalarlo como "autor del execrable hecho".

Rodríguez fue acusado por atar el 16 de agosto a "Rubio", al paragolpes de su camioneta y arrastrarlo varios kilómetros hasta que lo dejó abandonado sin vida en la ruta interbancaria 11 en cercanía a la localidad de Mar del Tuyú.

Recientemente la municipalidad costera clausuró de manera definitiva y dio de baja la habilitación del local de pesca que Rodríguez tenía en la calle 3 y 74 de Mar del Tuyú.