¿Por qué la luna tiene agujeros?

Antiguamente se pensaba que la Luna tenía agujeros como causa de la existencia de grandes volcanes ya inactivos, lo cual era lógico debido a la similitud entre los respiraderos de los volcanes y los cráteres lunares, ambos circulares y rodeados de relieves montañosos. No obstante, mientras que, el cráter lunar se encuentra a ras del suelo, los respiraderos de los volcanes, se sitúan en la cima de la montaña. Esta diferencia provocó que la teoría anteriormente descrita no fuese aceptada de modo que se siguieron desarrollando investigaciones e hipótesis.

Un astrónomo estadounidense planteó la teoría aceptada actualmente. Este afirmó que los agujeros lunares son el resultado del choque de meteoritos a gran velocidad, originando las muescas que a día de hoy observamos como agujeros o cráteres. De hecho, la Luna no fue siempre tal y como la observamos a día de hoy.

Esta teoría defiende que, en un principio, la Luna se encontraba creciendo constantemente debido a que su fuerza gravitatoria atraía a las rocas, polvo y asteroides que flotaban a su alrededor, de modo que, estas o bien pasaban a formar parte de su estructura o colisionaban con ella dejando los cráteres que observamos desde la tierra. Cuando este proceso fue aminorando, los elementos radiactivos de algunas rocas y polvo atraídos provocaron la formación de flujos de lava que eliminaron algunos cráteres dando lugar a enormes zonas oscuras, las cuales volvieron a ser deformadas en fechas más recientes por el continuo choque de meteoros que se produce en el universo.

Un hecho que abala esta teoría es que los satélites y sondas espaciales que el ser humano a enviado al espacio, también presentan estas muescas o huellas.

Foto: web