Células madre: paradigma en el tratamiento de la artrosis

Las células madre actúan en la regeneración o reparación de los tejidos dañados y sustituyen las células que mueren de forma rutinaria.

Estas células poseen gran potencial de expansión y diferenciación, se renuevan con facilidad y tienen la capacidad de generar nuevo tejido en estructuras como el hueso, tendones, cartílago, músculo, etc.

Extracción

El sitio más común que utilizamos para extraer éstas células es la médula ósea de la cresta ilíaca. 

Con una aguja especial y bajo anestesia local, se extraen entre 40 y 60 ml de médula ósea, la muestra es procesada y mediante una técnica de laboratorio la fracción de células madre es separada conjuntamente con otros importantes componentes como el plasma o las citoquinas (unas proteínas con importante función regenerativa y antiinflamatoria).

Este producto es conocido como BMAC (bone marrow aspirate concentrate) por sus siglas en inglés, es el principal tratamiento que existe hoy en día para el abordaje no quirúrgico de la artrosis, lesiones en tendones y columna.

Estos procedimientos deben ser siempre realizados en salas y laboratorios acondicionados para el uso de células madre, por personal médico capacitado y certificado.

Cuando se decide realizar tratamiento de artrosis de rodilla con el aspirado de médula ósea o BMAC, se puede logar un importante alivio del dolor y de la dificultad al caminar en más del 90% de los pacientes con artrosis avanzada.

Todos los procedimientos se realizan de forma ambulatoria, bajo anestesia local. 

La extracción de células y su aplicación son guiadas bajo ecografía para obtener la máxima precisión en la técnica.

Otro sitio de obtención, novedoso para algunos, es el tejido graso.

Mediante un procedimiento de lipoaspiración en zona abdominal o glútea se pueden obtener células para tratamiento regenerativo para luego ser procesadas, filtradas y aplicadas en el sitio de lesión.

Lo novedoso de éstas técnicas es el empleo reciente en las necrosis óseas o infartos óseos, como se las conoce vulgarmente.

La aplicación para estos casos severos es bajo radioscopia digital (un tipo de radiografía dinámica) y en general se inyectan las células directo en el cartílago o en el hueso lesionado.

Fuente: Filo.news