"Viene fuerte la movida de las mujeres acá, no va a parar"

Por Celeste López Arriaga
[email protected]

Hoy hay un buen número de proyectos musicales liderados e integrados por mujeres en la Comarca, en un contexto nacional en el cual la ola violeta llegó al ámbito musical, tradicionalmente copado por varones. Las mujeres a nivel nacional están armando redes y trabajando en forma colectiva para mejorar las condiciones de su actividad musical y el acceso laboral. 

La lucha emblemática del colectivo es por la Ley de Cupo Femenino en Festivales impulsada por la campaña ‘Más músicas en vivo‘, aprobada por el Senado y esperando su tratamiento en la Cámara de Diputados.

Hacia fines del año pasado las músicas de la región Viedma - Patagones se nuclearon con el objetivo de aprovechar las propuestas del Instituto Nacional de la Música (Inamu) que comenzaba a trabajar con su Agenda de Género en distintas regiones del país. Las distintas actividades se pueden ver en inamu.musica.ar/agendadegenero 

Hoy en la Comarca se está trabajando en un Protocolo de Violencia de Género para el sector y también se está implementando el ‘Cupo femenino‘ en los eventos musicales organizados por la Asociación de Trabajadores de la Industria Musical de la Patagonia Norte (Timpano). 

Carla Galvez, música e integrante de Timpano nos contó sobre la reciente organización de las mujeres músicas de Viedma y Patagones.

‘Empezamos porque el Inamu hacía una reunión con todas las delegadas mujeres del país en Cipolletti. De nuestra región fue Tristana Pissaco (lidera ‘De Viaje‘). Como queríamos que ella fuera representativa del sector femenino, rastreamos a todas las mujeres y armamos un grupo llamado ‘Musijeres‘ donde se plantearon inquietudes y dudas para llevar al encuentro de Cipolletti‘.

La situación latinoamericana y nacional

Un estudio de 2017 realizado por el colectivo Somos Ruidosa, reveló la realidad sobre la participación femenina en Festivales de México, Chile, Colombia, Argentina, y Festival Latino de EE.UU: de 2000 artistas solistas o agrupaciones, el 78% fueron hombres, 11,3% fueron bandas mixtas y 10,6% fueron artistas mujeres o bandas formadas por mujeres. En el caso argentino la representación femenina es aún más baja. En Festivales de Rock, la participación fue de un 2,6% y un 10,9% de bandas mixtas - donde hay al menos una mujer-.

Según el Registro Nacional Único de Músicos del Inamu (en 2018 tenía 37.346 artistas argentinos registrados) hay un 80% de músicos hombres y sólo un 20% de mujeres inscriptas. Y la misma proporción se repite en quienes aspiran a subsidios del Instituto.

Después del encuentro de Cipolleti, Noe Pucci, música neuquina y representante del Inamu en la Patagonia vino a Viedma. Carla Galvez lo relató así: ‘Noe Pucci vino a Viedma y nos encontramos todas, también las disidencias. Hicimos una jam de mujeres y escuché un montón de gente que me rompió la cabeza, como Lu Ozuna que hace una percusión espectacular o Luci Arlequín que es re talentose‘.

A raíz de una denuncia que circuló principalmente en las redes y fue replicada por agrupaciones y feministas independientes de la Comarca, desde Timpano se está elaborando un Protocolo de Violencia de Género para la Industria musical de la región.

Carla nos contó que también están trabajando en otros aspectos para lograr un mayor acceso de las mujeres a los espacios. ‘Estamos implementando un Cupo femenino en nuestra región, a partir de la media sanción de la Ley de Cupo Femenino en Festivales. Timpano gestionó un ciclo de artistas independientes, articulando entre la UNRN y el Inamu. En el ciclo se va intercalando un artista varón con una artista mujer. El Inamu ofrece un cachet para los músicos, y la Universidad otorga el espacio y el sonido‘.

Si bien hoy hay muchas mujeres liderando proyectos musicales en la región, la distribución en géneros aún no es equitativa. ¿Por qué creés que hay menos mujeres que varones? 

‘Tiene que ver con el patriarcado en general, es espejo de lo que vivimos, las mujeres siempre estábamos en un segundo plano. Fabi Cantilo decía que fue construyendo su propia autoestima hasta que pudo pararse y decir: ‘bueno yo compongo y yo hago esto, ¡pum!‘ Creo que a nosotras nos cuesta más eso porque desde la estructura de nuestra sociedad la mujer tenía un rol secundario‘.

Como dice el proyecto de Ley de Cupo Femenino en Festivales, esta lucha tiene que ver con que las mujeres puedan ‘encontrar espacios donde exponer su visión del mundo a través del arte‘. 

A esto se refería Carla al hablar sobre lo que ella siente cuando escucha música hecha por mujeres. ‘Todo lo que escucho desde lo femenino me canta, me lee, y cuando yo canto siento lo mismo. La devolución que me han dado las mujeres es esa que te llega al alma porque era lo que vos querías transmitir. Es una ola que no va a parar y se va a hacer cada vez más grande‘.

Sororidad y ¡adelante!

Con respecto al sentimiento de sororidad que se siente entre las músicas, Carla expresó que ‘Las mujeres cuando nos encontramos con otras mujeres nos sentimos más fuertes, más valiosas. Eso nos fortalece y nos da bríos para poder seguir abriéndonos paso, armando cosas y mostrando lo que hacemos. Viene fuerte la movida de las mujeres acá, no va a parar. Hay mucha ternura entre nosotras. Yo siento ese reconocimiento de haber sido la primera abriendo camino, después de tantos años no me da miedo encarar lo que sea ante quien sea‘.

En 2005 Carla comenzó a participar en bandas de rock y blues de la Comarca, y desde el año 2012 tiene su proyecto de banda, con su nombre al frente.

¿Cómo fue el pasaje de participar como corista a liderar tu proyecto de banda?

‘Siempre digo que todos tenemos un trampolín. En mi caso fue una banda que teníamos con el ‘Cabezón‘ Calvo, uno de los que iniciaron la movida del rock en la comarca. Él me dió alas: ‘hacé lo que quieras, vos sos un animal de escenario‘. Eso te da seguridad, empezás a probar y te das cuentas que podés hacer muchas más cosas. Empecé a componer y me mandé con mis temas‘.

Al comenzar con su proyecto se encontró con personas que la desestimaban por ser mujer: ‘En el ambiente del rock no había bandas de mujeres y estaba esta cosa de ‘banda de mina, no es rock‘. Inconscientemente hay una cosa que dice que una mujer no puede hacer rock, somos blanditas, somos suavecitas‘.

En la actualidad es mamá de dos nenas y eso cambió su forma de hacer música: ‘Me corrí un poco de la escena del rock porque fui mamá y las noches ya no son las noches de antes. Me copa la cuestión más acústica, me volqué a la música popular, poder ir con mi guitarra y cantar es mucho más llevadero que tener que armar toda la banda‘.