22/04/2017

El maquillaje como expresión artística

Ximena Otero nos presenta un mundo nuevo, el maquillaje se transforma en arte sobre la piel. Hoy ella apuesta a nuevas técnicas, nuevos desafíos, entre ellos, enseñar...

El maquillaje como expresión artística
Créditos: WEB
Créditos: WEB


¿Cuándo y cómo decidiste te dedicarse al maquillaje profesional?

 

Fue por causalidad… me fui a La Plata a estudiar cuando terminé el secundario.


Había decidido estudiar escenografía, empecé en Bellas Artes y la verdad a esa edad no sabía bien qué quería hacer de mi vida, sabía que quería algo relacionado con el arte y con lo social también, aunque nunca me había dedicado hasta el momento a realizar alguna técnica artística con continuidad. A mitad del primer año de haber empezado Bellas Artes tuve que dejar por problemas personales.


Al año siguiente comencé la licenciatura en Trabajo Social, quería estar cerca de los más inocentes e indefensos: niños en estado de abandono, pobreza extrema, locos de la vida, mujeres violentadas, grupos minoritarios, etc., resultados de un sistema perverso que por lo general excluye, no incluye. También empecé durante ese mismo año un taller de teatro dentro del Hospital Municipal José Tiburcio Borda. El taller era con seres internados en dicho hospital y con seres interesados que íbamos de distintos lugares de la provincia de Buenos Aires. Un taller de experimentación donde nos comunicábamos a través del movimiento, tratando de no utilizar la palabra y donde le preguntábamos a la ciencia, desde el arte, dónde comenzaba o terminaba la locura. En las actuaciones por lo general trabajábamos con psiquiatras u otros especialistas con conocimiento en éste tema de la “locura”. Había varias expresiones artísticas dentro del taller. Los seres internados que participaban eran los “locos” más leves, los que parecían que recogían estrellas, porque había de todo entre los 1500 internados de ese momento, con los más violentos no podíamos compartir.

 

Estuve dos años en Trabajo Social y en el taller de teatro tres. Antes de decidir alejarme de la carrera entré en un instituto de menores y me desarmé, entendí que mi personalidad no estaba formada para aguantar tanta tristeza, tanto abandono del humano para con el humano mismo, absorbía demasiado los problemas ajenos y decidí ir por otro lugar. Tal vez flaqueé pero no me arrepiento del cambio que eso produjo.


Caminando por las calles de La Plata, sin saber qué hacer, me encontré con la Escuela de Teatro y entré para retomar y averiguar por la tecnicatura de escenografía y quedé maravillada al descubrir la técnica del maquillaje, todo lo que se podía crear en un rostro o cuerpo como lienzo con texturas, colores y sus claros/oscuros, un mundo nuevo se abría ante mis ojos, empezaba a aprender a ver desde un lugar nuevo! Sentía “magia” y los pelos se me erizaban: el maquillaje como herramienta de comunicación social, teatral, circense, audiovisual… el maquillaje como expresión artística para transmitir, experimentar, cuestionar, embellecer! Sin utilizar en la medida de lo posible la palabra que tantas veces me determinan.


Había llegado, según lo que sentí en el latir de mi corazón, lo que quería para el resto de mi vida.


¿Cómo definirías el maquillaje en relación al arte visual?

 

De todas las artes visuales, el maquillaje, es una de las más efímeras y desde sus orígenes es una herramienta de comunicación, de expresión, de transformación.
Considero al profesional del maquillaje un artista no solo por maquillar un rostro, sino, por lograr que ese rostro exprese algo.


El arte del maquillaje es una profesión que no se debe tomar a la ligera; sin conocimientos básicos sobre materiales, colores, texturas, los resultados pueden estar muy lejos de los deseados. Sin la práctica constante, esos conocimientos son pura teoría.


Uno tendría que maquillar para quien sabe, para marcar la diferencia y no para quien no sabe; con esto quiero decir que hay muchos maquilladores de oficio que no sienten al maquillaje como un arte visual, por más que sea social y terminan desvalorizando la constancia que lleva aprender el poder transmitir estéticamente, con criterio.

 

¿Qué es lo que más disfrutas de tu trabajo? ¿Cuáles son las propuestas que mas te interesa realizar?


Disfruto todo el proceso del maquillaje! La llegada de una idea que baja desde algún lugar, realizar los bocetos de la idea para llegar a un solo boceto donde quedo conforme con lo creado, hacer pruebas de estilismos imaginados (pelucas, coronas, accesorios, vestuario), hacer pruebas de maquillaje, hacer el maquillaje y ver las fotos o video del resultado final de la realización del maquillaje, que es lo que queda para poder mostrar lo que uno hace, por lo efímero que resulta ser la técnica.


Las propuestas que más me interesan son las que llevan un camino largo y son, por lo tanto, más placenteras al final. Las que te hacen investigar, experimentar, crear, descubrir algo nuevo, que no hiciste nunca y significa un desafío. La que trabajas en equipo porque multiplica resultados, ya que el maquillaje no es una herramienta aislada, va de la mano con muchas más expresiones artísticas y en equipo sentí los resultados más espectaculares.

 

Contanos acerca de los trabajos más extraños que realizaste.


Los trabajos más extraños que realicé fueron para una película de terror. Éramos varias chicas en ese momento trabajando en un taller de efectos especiales para la dueña del taller, en Capital Federal y había que hacer muchos moldes y duplicados de cabezas de distintos actores porque en la película todos terminaban acecinados con la cabeza por un lado y el cuerpo por el otro.


Yo era la última que había entrado a trabajar en el taller y justo comencé con esta película, litros y litros de sangre había que fabricar.


Había un actor en especial que, en la película, lo mataban con un palo y el acecino se ensañaba tanto con él que le aplastaba la cabeza y, de a poco, tenía que ir apareciendo el cráneo mientras lo iba desfigurando. Había que hacer ese efecto especial y luego de ideas que iban y venían y de cómo hacerlo trajeron un cráneo de verdad, comprado al cementerio (no se ni cómo ni dónde se hizo la transacción, ni si era legal o no). Me tocó a mí manipularlo para que entrara en el molde de la cabeza que ya estaba hecha así que amoladora en mano, anteojos de protección, barbijo, guantes y pidiéndole permiso al cráneo, ante todo, entré a lijar y cortar hueso.

 

Experiencia que no voy a olvidar con facilidad! Sobre todo el olor a hueso lijado.

 

Ximena viviste muchos años fuera de Viedma, ¿Dónde estuviste? ¿Dónde te formaste?


Cuando terminé el secundario me fui a vivir a La Plata y ahí estuve 7 años, hasta que me recibí de maquilladora en la Escuela de Teatro.


Luego me fui a Capital Federal 1 año y medio, trabajaba en una cadena de peluquerías muy reconocida de maquilladora, mientras hacía cursos intensivos en el Teatro Colón con María José Angelini de caracterización, maquillaje social con Juan Carlos Echeverry y experimenté con la dermopigmentación o maquillaje permanente y también realicé algún que otro tatuaje. El objetivo de trabajar en la peluquería era juntar la plata para poder irme a Barcelona a realizar un curso de formación completa en maquillaje en una de las mejores escuelas del mundo: Stick Art Studio.


Me fui a Barcelona, hice el curso de 9 meses donde cursaba 4 horas de lunes a viernes. Te enseñaban desde maquillaje social hasta efectos especiales. Un lujo! Las mejores profesoras, técnicas pulidísimas, más mundo por descubrir y me recibí sabiendo que lo que había vivido en ese tiempo era un sueño a puro color. Feliz.


Me quedé 10 años en Barcelona viviendo y viajando a cada lugar que podía de Europa, Asia, África, América del Norte. Trabajé en distintos rubros, desde basurera donde conducía un furgón con un container detrás e iba haciendo papeleras en una zona industrial de un barrio de Barcelona hasta maquilladora en un canal de televisión en Hospitalet de Llobregat, localidad cerca de Barcelona.


Luego volví a Viedma y estuve dando distintos cursos de maquillaje, primero en los camarines del Centro Cultural, luego en mi estudio particular Caracol y también en la Escuela de Arte de Carmen de Patagones donde daba la materia de maquillaje para la carrera de Profesorado de Teatro. Me quedé 5 años en la Comarca.


Antes de irme, tuve la suerte de ser la maquilladora local (primero estaba la maquilladora que formaba parte del equipo estable) de la película Jauja que se filmó en el balneario de La Lobería, del director Lisandro Alonso, que tenía como actor principal a Viggo Mortensen y ahí empecé a sentir ganas de irme a Capital Federal a aprender FX (efectos especiales) y trabajar en cine, televisión, publicidad, teatro, ambientes que me apasionan.


Me fui a Capital y me quedé casi tres años, hice todo lo que había planeado: trabajar en un taller de efectos especiales, en cine como asistente de varios largometrajes nacionales e internacionales, llegué a ser jefa de maquillaje de varios cortometrajes subvencionados por el INCAA y otros particulares, la jefa de maquillaje para una compañía teatral de clown y participar en varias publicidades, eventos de empresas, trabajos para fotógrafos, etc. Algunos domingos también iba a maquillar a Parque Centenario, al lado de la calesita, por muy poco dinero para llegar a otro público y practicar, practicar y practicar y compartir con la gente.


Hace un poco más de medio año volví a La Comarca nuevamente, gracias a un cambio económico que hubo que dejó sin trabajo a varios. Se me empezó a hacer difícil la estabilidad desde distintos puntos y quise volver al lugar que siento como mi casa.

 

Regresaste hace poco a La Comarca. ¿Cómo fue este cambio? ¿Cómo te recibió la gente?


El cambio fue bueno, ni bien llegué organicé cursos intensivos de perfeccionamiento para maquilladores donde tuve muy buena respuesta por los maquilladores de la zona. Estaba rodeada de mi familia y amigos que tanto había extrañado, mucha gente conocida también me daba la bienvenida. Capital es un lugar donde hay mucha gente pero uno se puede sentir solo con facilidad sino estás al lado de tus seres queridos y más si no hay trabajo digno y ves que tu tiempo y el tiempo de gente valiosa, los esfuerzos, el conocimientos no están siendo valorados. En La Comarca estaba contenida y rodeada de la hermosa naturaleza del lugar.

 

Tenés una mirada amorosa siempre hacia la gente que te rodea. ¿Cómo viste a tu Comarca cuando volviste con un montón de proyectos?


La veo por un lado preocupada por tanta inestabilidad económica e injusticias sociales, donde la violencia se asienta cada vez más por una falta de responsabilidad del estado, por no invertir en educación, en un trabajo digno para todos, en un techo como necesidad básica, por dejarnos a la deriva... pero por el otro lado veo muchos seres con ganas de hacer, que proyectan desde lo artístico, que creen en el amor, que practican la empatía y que saben que cuando las energías se juntan positivamente se pueden lograr cosas espectaculares. Que no están contaminados por los medios falsos de comunicación y piensan que la libertad está en el pensamiento, en la comunicación limpia basada en el respeto mutuo y no en el imponer o repetir sin razonar.


Hay que estar atento, las posibilidades pasan delante de nosotros, solo que hay que tratar de no distraerse y así los proyectos se pueden ir cumpliendo.


Estás lanzando un curso de iniciación al maquillaje. ¿De qué se trata este curso?


Si, sería para comenzar en mayo, es un curso de iniciación al maquillaje social a nivel profesional. En él se aprende desde cero, no hace falta conocimientos previos de maquillaje, te doy todas las herramientas para aprender esta técnica y poder comenzar, al finalizar el cursor, a trabajar de maquillador. Las clases son teóricas/demostrativas y mucha práctica de los interesados de cada tema. Vemos cómo debería ser un estudio de maquillaje, productos, colorimetría, morfología del rostro, visajismo con distintas técnicas de delineados, sombras, labiales, rubores, tonalizadores, etc. maquillaje según la ocasión, el lugar. Habrá prácticas que los alumnos de maquillaje realizarán con alumnos de fotografía del curso de Germán Frías para experimentar los resultados de sus maquillajes en estudio y al aire libre y también un taller básico de fotoshop y de cómo armar tu propia marca que lo coordinará la diseñadora gráfica Eugenia Alonzo.


Es un curso muy completo, motivador, exigente, donde se aprende o se aprende!


También estoy organizando cursos de especialización para maquilladores y talleres de Automaquillaje que es para que uno aprenda a maquillarse.

 

Hablemos de las mujeres y el maquillaje, el arte de conocer nuestro rostro y potenciar lo bueno que tenemos… ¿Que le dirías a las mujeres que desean saber cómo maquillarse y no se animan a hacer un curso?


El maquillaje se ha transformado, en cuanto a lo social, en un elemento casi indispensable para realzar la personalidad de la mujer, respetando, sin embargo, sus características personales; nunca anulándolas. Las técnicas que se utilizan y los productos nuevos que hay en el mercado permiten dar al rostro un aspecto natural que se adapta a la edad y a las circunstancias de cada una. Como decía antes, el maquillaje es un arte, que se basa en estrictas normas heredadas de artistas y pintores, quienes nos legaron sus estudios sobre las proporciones del cuerpo humano y del rostro. De ésta forma y con ayuda del maquillaje, nació el “visajismo” o estudio del rostro y su estructura. El maquillaje consigue realzar la armonía, las proporciones y el equilibrio del rostro, dándole a la mujer un aspecto cuidado, luminoso y bello, a cualquier edad. Maquillar no es enmascarar, cubrir, sino encontrar un equilibrio de líneas en un rostro y la armonía de todo el conjunto.


Les diría a las mujeres que no se animan que vengan a mi estudio! Los cursos pueden ser grupales o individuales y que no se van a arrepentir.


Que se animen y así marcan la diferencia!


CaraCol (mi empresa individual) les abre la casita porque CaraCol es Cara Color donde también se puede jugar dejando a la timidez de lado.

 

Volvamos a tus desafíos. Has caracterizado gente, has logrado trabajos maravillosos, ¿Cómo comienza el proceso creativo?


Con una idea que baja, una inspiración que llega, con una temática impuesta. Con las ganas de hacer, de resolver y de valorizar.
 

Para los cursos se pueden comunicar en:

Mail: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. .
Face: Ximena Otero
Teléfono: 1122392391 (número de Bs As) 

 

Fotos: Miguel Basterra.

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